domingo, 19 de junio de 2011

EL PASAPAN Y BAJADA POR BEZOYA DE ORTIGOSA

Sucedió el día 18 de junio de 2011.

Tras negociaciones telefónicas del día anterior y ante al ausencia de caimanes operativos en la ciudad de Segovia, me lance en busca de dos caimanorros buenos, con los que había quedado a las 10:00 horas en lo que llamamos nosotros panorámico, sito en la carretera N-603 (Madrid-Segovia).
Salgo sobre las 09:05 horas y como realmente no se lo que voy a tardar, le voy dando caña, subo por detrás de baterias hasta el Polígono de El Cerro y luego por el barrio del Puente de Hierro a salir a la carretera SG-723, pasado el cruce de Hontoria y a unos 500 metros sale un cruce a la izquierda que es la carretera que lleva a Otero de Herreros por Riofrio y la Losa. El asfalto nuevo de esta carretera se encuentra mojado por la lluvía caida en la madrugada y se respira el hedor alquitranado, nauseabundo.
Una vez en Riofrio veo que voy bien de tiempo y aminoro la marcha, estando pendiente de un ruido que llevo en la bici desde que he salido y que me está volviendo loco y que no me dejara ya hasta el final de la ruta.
Se empieza a despejar para dar paso a un día esplendido.
En el panorámico al minuto de llegar veo al caimán Alfredo otro compi Canyon y a poco se nos une el caimán Pascuiy. Comenzamos la ruta a un ritmo tranquilo, intentando no sofocarnos con el calor que está haciendo.
Al fondo la mujer muerta.

Pascuiy a tope

Alfredo



Alfredo con todas las moscas de la provincia en su cabeza.
En la primera fuente se para para beber de sus cristalinas aguas y continuamos por la última zona, la más empinada.
Nos falta uno para los Dalton
Tras abrir y cerrar porteras y realizar el último tramo empinado de zetas coronamos el Pasapán.

Momento merendola, el caimán Alfredo siempre tan previsor saca un bocadillo flauta de tortilla de patata por arte de magia y nos ponemos las botas saboreando tan exquisito manjar en tan bonito lugar.
La bajada por el mismo lugar y al llegar a una curva cerrada tiramos por un camino que sale a la izquierda y que nos baja por el rancho de la Becea hasta Ortigosa del Monte.
Bajada en algunos tramos comprometida con mucha arena y carcavas. En una curva cerrada el caimán Alfredo que abria manada da una pingoleta con la bici y da con sus huesos en la arena. Arena tipo desierto Sahara que no hay quien la pase sin caer. En fin sin consecuencias, la caida casi me dió tiempo a grabarla en video o sea que na de na y menos para un caimán como Alfredo.


Pasamos por de la Becea y cruzamos la carretera N-603 para ir por Ortigosa hacia la Losa donde nos tomamos unas cervecitas y dejamos al caimán Pascuiy con su familia.
Pos pa ellos ala.

Excelente cerveza.
Bueno continuo con Alfredo que se hace tarde y tras pasar Riofrio y el puertecillo este se desvía hacia el soto de Revenga y su casa y yo continuo por donde vine a toda máquina que se hace tarde.
Bonita salida con un día expléndido y señores como me sentó de bien el bocata de Alfredo en el Pasapan a teta de novicia.

Bueno hasta luego nos vemos en los caminos. Fuerza y Honor.


P.D.: Tenemos que quedar una tarde y pegarnos una merienda en el chozo Aranguez, a ver si se animan todos los caimanes.

martes, 14 de junio de 2011

POR CASUALIDAD EL CHOZO ARANGUEZ

Ocurrió el día 14 de junio de 2011 en la sierra de Segovia.


Después de un fin de semana cargadito, debido al bebercio y a la manduca de más, como consecuencia de haber asistido a una santa comunión el sábado, me ha dejado el cuerpo para los leones. En fin el lunes le dí calabazas al Mori y hoy no podía decir que no y quedé con él a las 09:00 horas para hacer una rutita.
Puntual como un inglés apareció el caimán por los atrases de mi humilde morada, iniciando la etapa de hoy, enseguida nos asaltan las dudas de donde ir, le comento que yo ayer fui con Tino(mi perro-Can de palleiro)por la fuente la Plata y las zetas de la Silla del Rey. Bueno el Mori no dice que no, o sea que pa ya que vamos.
Enseguida me doy cuenta del olvido de la cámara de fotos, en fin no se puede estar en todo.
Ciclamos por el carril bici ha paso moderado charlando y criticando a los jefes hasta pasar el pantano donde nos metemos por la senda terriza del margen derecho hasta el campo de polo de San Ildefonso, de allí a la puerta de Cosio y por la pista hasta la puerta con cerradura clip. Seguimos por el camino, pasamos el puente y llegamos a la fuente la Plata. Al caimán le gusta el recorrido, es la primera vez que viene por esta vereda y le está gustando.
Continuamos hasta llegar a la pista asfaltada que sube a la silla del Rey, le comento que hay otro camino que sale de los troncos  y que es más duro, pero no cuela ni por su parte ni por la mía, otro día será.
Llegamos a la curva de la silla del Rey contándole que haber si un día subimos al chozo Aranguez, me dice que se sube por un camino que tira a la izquierda en lo que llaman el Salto del Corzo, me estira el trapo rojo para que subamos por el citado camino y entro al trapo como un mansito.
Subimos por el citado camino y paramos en un pozo de los que construyen para los incendios, allí bebemos y comemos algo, más bien poco, cada vez tenemos menos ganas de comer naaaa.
En el citado pozo sale un camino hacia la derecha que se interna en el bosque y tiramos por él, nos lleva por parajes muy chulos llenos de vegetación y por un terreno bastante bacheado. Desembocamos en un arroyo el cual cruzamos y subimos por una pendiente para hombres hechos y derechos. Seguimos porque todavía vamos bien de tiempo, hasta donde se acaban los pinos y empieza el bosque bajo. En ese lugar empiezo a babear por el bonito paisaje que se nos presenta. El macizo del Peñalara a nuestra vista, con el último nevero y el suelo con un tapíz de hierba recorrido por numerosos riachuelos que le dan una humedad espectacular.


Se acabó el bosque
Parece mentira pero por fin estamos en este lugar, la verdad que de saber que está tan cerca de la silla del Rey hubiéramos subido antes seguramente.
Pure Canyon

El Mori por el sendero.

El chozo al fin.
Realizamos una paradita en el chozo, para ver su arquitectura y equipamiento. No le falta de nada, estufa, leña vituallas, calimocho en abundancia etc.
Calimocho que no falte que luego no se baja igual.

Estufa y vituallas

Ese Tito no soy yo, que conste.

Momento inmortal. Haber esa tripita.

En fin dan ganas de tumbarse a la bartola.
Bueno hubiéramos querido estar más tiempo y disfrutar del momento pero como siempre el tiempo nos apremia y tenemos que bajar cagando leches a maricón el último.

Un último vistazo y pa casa.

 De la bajada como es normal en mí no hay fotos, y menos con el móvil que hay que ser del circo para no pegársela.
Bajamos por donde hemos subido pero en la curva de la silla el Rey bajamos por el camino que sale a la izquierda que va ha dar a los troncos, bastante más empinado y en peor estado.
En el carril bici nos encontramos a los caimanes Oscar y Kike que están trabajando a tope, les damos novedades y pa casa que llegamos tarde.
Maravillosa etapa si señor, el único pero, ir con el tiempo justo. Otro día con más caimanes nos llevamos un melón.

Un saludo desde la profunda y jonda Segovia. Fuerza y honor.

P.d.: Alfredo-Javi haber si quedamos el Sábado. Un saludo.


jueves, 2 de junio de 2011

Por el camino de la Canaleja hacia Valsain

Ocurrió una mañana del día del señor, el dos de junio de dos mil once.

A las 09:30 horas quedamos como siempre y donde siempre, esta vez salimos los cuatro de Nueva Segovia, los caimanes Mori, Mariano, Bart y el Menda Lerenda. Hace un ris que quita el sentiooo, frio yo por lo menos lo tengo que vengo de pantalón largo y botas de príncipe de Bequeler, por si acaso tú. Los compis abrigaditos pero de corto que son unos caimanes valientes. No tenemos muy claro donde ir, y al final decidimos hacer una Cueva del Monje y bajar luego por el camino de La Canaleja hacia casa.

Salimos por el carril bike en dirección San Ildefonso, cruzamos el Pantano por el margen derecho y llegamos a la gasolinera de la población donde El Mori tiene que llenar la rueda de aire que la lleva baja por no se qué del líquido antipinchazos.


Aprovechando para alinear el freno trasero.
Todavía ahora que estoy escribiendo esta crónica estoy oyendo el ñic-ñac del freno trasero del Marianico, que tostón señor que tostón.
Tras los oportunos ajustes mecánicos seguimos hacia la puerta de Cosio, donde nos adentramos en el bosque y subimos hacia la pista asfaltada que nos lleva a la Cueva del Monje y más allá.
La subida la realizamos unos mejor que otros pero prácticamente unidos, pasamos la Cueva y enfilamos hacia el puente de los Quebrados. Pasado este Puente el Mori y el Menda Lerenda rompen hostilidades y llegamos a Prado Redondillo a maricón el último. En Prado Redondillo hacemos el repostaje y los caimanes Marianico y Bart prueban la Canyon del Mori.

 Tras el momento paradita nos movemos sin mucho brio hacia el nº8 cuesta del infierno que a todos se nos atraganta, pasamos esta y la fuente La Peseta para llegar al cruce con el camino hacia Cotos dejándolo de lado y desviándonos 50 metros más allá hacia la derecha para enfilar el camino de Canalejas.
Camino entretenido sobre todo con la cantidad de humedad que contiene, mi neumático trasero más de una vez lucha por salirse del trazado. Sube y baja entretenido entre piedras y árboles.
Hoy hemos hecho bueno el dicho que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra, el caimán Marinico que en otra bajada hacia Valsaín se hundía hasta las trancas en un charco en el camino, hoy vuelve al mismo charco y con dos criadillas vuelve a pasarlo y volviéndose a meter hasta las trancas con un pilin de barro negro en sus zapatillas y pantorrillas.
el charquito de Mariano
Se conoce que el caimán le ha cogido cariño al charco.
En esto mi cámara dice basta, la etapa que soportó ayer con mi hija de excursión a Madrid la ha agotado.
Seguimos circulando por un terreno difícil y de pronto el caimán Bart desaparece. En un principio pensamos en que algún animal sediento de sangre le había atacado y raptado, pero no, al poco nos llama y dice que nos espera en Valsaín que se ha ido por la carretera.
En fin seguimos un poco más y volvemos a llegar a al carretera y Valsaín. Ni rastro del caiman Bart.

Llegamos a Valsain y seguimos hasta los caballos bajando luego por la cola del pantano hacia la Cl-605, por senderitos arriba y abajo, damos con el camino que antaño nos enseñó nuestro compañero Kike.
Tras un sube y baja carril bici y go home.

Un saludo desde la profunda y jonda Segovia. Fuerza y honor.