lunes, 4 de abril de 2011

El mítico Collado del río Peces

Como de costumbre quedamos en el conservatorio de música a las 09:30 horas, hoy solo vamos el menda y el caimán Mori, los demás, unos por motivos laborales y otros por asuntos personales, no pueden estar con nosotros.
Comentamos por donde ir y el Mori dice que alguna cosa nueva, o que llevemos tiempo sin hacer, propone una sillita del Rey, yo le comento que he estado viendo el blog de los kamorcas y éstos han subido al Collado del río Peces, picándole diciéndole que como todavía no esta en plena forma lo mismo es mucho para él, a lo que responde que narices que pa el Collado del río Peces a muerte.
"Alea jacta est"; empezamos por la pista verde para tomar el camino de Kike, que nos lleva hasta la granja escuela y de allí al cementerio de Valsaín pasando por la curva de subida a los caballos para calentar motores. Subimos la Gallega sin tiranteces, charlando y en paralelo, disfrutando del paisaje primaveral, en el que hoy se vislumbraba la sombra gris de las nubes sobre los tejados de Valsaín con el Sol luchando por abrirse paso entre la nubosidad existente.

Coronamos la Gallega y tiramos por la pista de la derecha, pasamos el río de la Acebeda que baja caudaloso a no más poder, soltando espuma y gritos de sus aguas al chocar contra las rocas descarnadas de su cauce angosto.

El caimán Florex se empieza a mosquear ya que no está muy seguro por donde hay que desviarse y llevamos un rato ya en la pista subiendo, hasta que de repente se ve el camino a la izquierda el cual tomamos con precaución y guardando fuerzas para lo que nos espera.
Empiezo a marcar la subida a un ritmo moderado en espera de repechos peores y el caimán Mori detrás de mí a buen paso resoplando como un búfalo. Solo he subido una vez pero esta me parece igual de dura que la primera, hay unos repechos sobre todo al paso por dos curvas cerradas que son de aupa.

Llegamos a un claro cerca del alto de Navahermosa, hemos pasado de 1390 metros en el desvío de la pista a unos 1650 metros en nada de espacio. Este claro nos da un respiro y le comento al Mori si paramos pa tomar algo, y el espartanamente me dice que nooo, que para el Collado a muerte.
En fin esta última subida le engaño un poquito diciéndole que falta poco, bueno en fin lo típico de estos casos.
Y por fin el mítico Collado del río Peces, con su arbolito y todo.

Ese caimán.


Jodido pero contento.
En fin momento relax en el Collado, traguito de agua y barrita cereales. Mori me ofrece sus ya típicos palotes que mastico y trago agradecido.

Bueno para abajo por la trialera, pues no, que voy con Mori, a investigar por donde va el camino de la derecha. Ya os digo que a ninguna parte después de bajar un ratito se pierde en un arroyo y a pata pa bajo hasta llegar al arroyo Retamar que el caimán Mori lo pasa a su estilo.


El caimán jugandosela.
Seguimos para intentar llegar a la pista que va a la fuente la Reina por parajes de belleza singular, atravesamos un arroyo que manda huevos, por cierto, los tuve que echar para pasarlo con mi célebre frase "BANZAI", y una vez que el caimán Mori vio que no daba con mis huesos en el agua, pasó el tío listo (los kamorka tienen una foto y video de este paso del arroyo).
Llegamos a la fuente la Reina, repostamos agua y para casa por el cordel de la Fuenfría, camino Santiago y fuente San Pedro, con bastante agua y chocolate en varios tramos. Seguimos por el camino de los tanques, donde nos cruzamos con mi super vecina Pilar, que estaba corriendo como una fiera.

 En fin llegamos a casa y el Mori todo contento de haber realizado una ruta nueva, y dar por terminado un reto, ahora a por el próximo.


Más fotos.