jueves, 31 de marzo de 2011

Niebla en la Canaleja

30 de marzo de 2011.-

Como de costumbre quedamos sobre 9:30 horas en el Conservatorio de música después de dejar a las chicas en el cole. El horizonte que se presenta es más bien nublado, el caimán Mori nos advirtió el día pasado que él no salía con este tiempo, que seguro que llovía. En fin la verdad es que hay mucha humedad en el ambiente y el panorama en la sierra es lúgubre.
Marianico me comenta que ciclemos por asfalto que está todo muy mojado y embarrado; vamos para la Cueva del Monje y el menda como es muy buen mandaoo, pues ala pa ya. Por la pista verde charlando y criticando al jefe, nos pasa un kamorka de negro como una bala, parece que se nos ha calado la btt.
En el pontón tiramos por el camino terrizo paralelo a la carretera en dirección a San Ildefonso y de allí a la pista de la Cueva del Monje, donde empezamos a tomar las primeras rampas, aun sin demasiada niebla.
Cuenta lo leyenda que en un paraje llamado la cueva del monje se refugió el avaro hidalgo Segura.
Mucho debía temer, pues al mismísimo diablo engaño ofreciendo su alma a cambio de poder y riquezas.

Pasamos el puente de los Quebrados y llegamos al punto de no retorno en el prado Redondillo, en este lugar o tiras otra vez por donde has venido o sigues hasta el final. En este lugar paramos un momentito para deleitarnos con un sabroso higo y Marianico con una barrita de cereales, un traguito y a continuar. En este punto los árboles ya chorrean agua y la niebla se masca. El caimán Florex tiene frio y se tiene que poner el chubasquero para seguir. Las bajadas están un tanto peligrosas si te pasas de velocidad; la mezcla entre tierra, agua y cemento hace un colage muy deslizante.

 Prometo comprarme una cámara en condiciones un día de estos para hacer fotos sin tembleque.

Pasamos el mal trago del hito nº8 y llegamos a la fuente de la Peseta sin novedad. Yo tan feliz, cuando en la bajada, nada más pasar el cruce para subir a Cotos, Marianico me hace medias, con treinta y una, tirándose hacia la derecha por el camino de la Canaleja hacia el Puente la Cantina. Y digo yo, pero no decía que hoy por asfalto, en fin señor llevame pronto, le sigo que soy muy mandaooo, pero pensando estamos tontos, con la que ha caído, todo mojado piedras y troquitos a tutiplén que deslizan más que la piel de una sardina, bueno en fin bajamos a buen ritmo, hasta donde sabemos y le pico a Marianico para seguir por el bosque hasta los Asientos, y allá que vamos, sube y baja sin descanso, todo embarrado.
Todo el tiempo pasando por arroyos y veredas encharcadas, por cierto al llegar a un charco en el camino (me suena a canción) de gran consideración, le digo al caimán Marianico que abría camino, la celebre frase para estos momento de "¡BANZAI! a muerte", y el caimán embalentonado por mi arenga, se lanza sin dudarlo hacia el charco para intentar pasarlo, craso error, el charco tiene la profundidad de la fosa de las Marianas, y el caimán se moja hasta el corvejón. Entre mis risas y sus improperios seguimos a buen ritmo, hasta que hago la croqueta del día, un revolcón como Dios manda, la rueda delantera se desliza en una raíz tipo sardina y al suelo el caimán y la blanquita, con gallardía torera me levanto con dolores y consigo enlazar de nuevo con Marianico que ya le aprieta la prisa por llegar que entra a trabajar y va a tener que comer como un pollo de granja.

 Se mascaba la croqueta desde el primer momento de entrar en la Canaleja. En fin es lo normal.


 No se lo que será pero después de la croqueta ya no andaba igual, estaba más afixiado que un molinero de Uralita S.A. Llegamos a Los Asientos y de allí a Valsaín subimos por la cuesta hacia los caballos para enlazar con el camino de Kike y para casa por la pista verde a carajo sacado. El caimán Florex con la lengua fuera y el piloto rojo encendido.
Una vista rápida al recreo de las niñas para el típico saludito fraternal y pa casa que me duelen hasta las muelas.


P.D. A ver los caimanes para el día 05 de junio que ruta proponéis.